Los cien días del General

El día 3 de Junio se cumplieron 100 días desde que el general Raúl Castro asumiera la jefatura del gobierno y del Consejo de Estado. Casualmente ese mismo día cumplió 77 años el flamante presidente cubano.

 

Son numerosas las especulaciones que se han forjado con relación a las expectativas de cambio que muchos esperan de la nueva Administración. Indudablemente existen razones para las mismas; el pasado 24 de Febrero, fecha en la que fuera electo Presidente por la Asamblea Nacional, Raúl Castro anunció cambios que pueden sintetizarse en una de las frases de su discurso “Reitero que el país tendrá como prioridad satisfacer las necesidades básicas de la población, tanto materiales como espirituales, partiendo del fortalecimiento sostenido de la economía nacional y de su base productiva.” Tambiénel 26 de Julio del pasado año habló de la necesidad de introducir cambios estructurales y de conceptos, y más tarde convocó a la población a manifestarse sin temores sobre el tema. La convocatoria provocó una avalancha de críticas y propuestas en las reuniones, que dirigidas y controladas por el Partido Comunista, tuvieron efecto en centros laborales, de estudio y sectores residenciales.

Transcurrido un período corto, pero significativo, es menester inventariar los referidos cambios:

 Se han levantado una serie de prohibiciones humillantes para la población cubana. En este sentido a los cubanos ahora se les permite hospedarse en hoteles, donde antes sólo lo hacían los turistas extranjeros, pueden comprar DVD, computadoras, contratar celulares, alquilar autos. Si bien es cierto que estos servicios y bienes sólo se pueden adquirir con pesos convertibles (cuc) a los cuales tienen acceso aquellos que reciben remesas del extranjero, trabajan en el turismo o en alguna actividad ligada a inversiones extranjeras, las medidas han sido bien recibidas por la población, la cual se ha enterado de las mismas por el comentario popular, pues de ellas sólo la contratación de celulares ha sido publicada en la Isla. _Admitir la reintegración de un derecho por quienes lo suprimieron resulta verdaderamente incómodo. Las medidas tienen también un efecto recaudador, lo cual se hace aún más evidente por los posteriores incrementos de precios de hasta un 18% a un grupo de productos que se ofertan en cuc.  Pero por otro lado se han introducido mejorasen los ingresos de los cubanos que lo reciben en pesos. Así, se aumentaron las pensiones en un 20% y se eliminó el tope de salario que un trabajador podía llegar a ganar.  También se le ha permitido adquirir la propiedad de la vivienda a personas impedidas de hacerlo por ser éstas propiedad de empresas o unidades militares.

 El estilo del actual gobierno resulta, en el plano interno y externo, más sosegado y muestra, tanto en el discurso como en las acciones, preocupación por los problemas de la población. Una muestra de esto último son por ejemplo las mejoras en el transporte de pasajeros, el mantenimiento de las calles y la reparación de las redes de abasto de agua.

 Las medidas hasta aquí detalladas van dirigidas al consumo. Con relación al incremento de la producción Raúl Castro declaró la producción de alimentos un problema de «seguridad nacional» Siguiendo esta premisa, el gobierno inició la entrega en usufructo de tierras ociosas. Con ello se espera disminuir la tendencia manifiesta en el incremento de tierras sin cultivar, las cuales crecieron un 25% en los últimos cinco años, según la estatal Oficina Nacional de Estadística (ONE) en su publicación «Uso de la Tierra en Cuba 2007». _El  país que fuera exportador neto de alimentos requiere actualmente importar el 84% de su consumo. 

 Por otro lado se decidió que la entrega de la tierra en usufructo se efectuara por medio de los municipios y no centralmente por el Ministerio de la Agricultura, medida tendiente a descentralizar las decisiones en este sector. También se ha mejorado el precio de compra de la leche y la carne a los productores y comenzó a venderse libremente aperos de labranza, herramientas y ropa de trabajo.

 Sin embargo en lo referente a la inversión extranjera no se han dado pasos que promuevan su incremento.  A comienzos de este año se cancelaron las licencias de 14 firmas extranjeras por presuntas actividades ilícitas. 

 De acuerdo con la Resolución 193/2008, el Ministerio de Comercio Exterior  canceló las facultades de comercio exterior a 29 empresas estatales y sociedades mercantiles cubanas, y modificó el listado de productos autorizados a importarse por los organismos competentes.

 En el aspecto político se pueden destacar como aspectos positivos la firma de dos protocolos internacionales sobre derechos humanos, los cuales durante años el gobierno cubano se negó a firmar. También la conmutación de la pena de muerte a más de treinta presos, pero por otra parte aún continúan en prisión los periodistas independientes y disidentes encarcelados en la primavera negra (Marzo del 2005) y fueron reprimidas un grupo de madres y familiares de éstos, conocidas como Damas de Blanco. 

 Si comparamos los cambios, que algunos se atreven a llamar reformas, observados en el corto período analizado con la inmovilidad que durante años sufrió el país y de que fuerzas inmovilistas aún perduran en las altas esferas del Poder, entonces no deben considerarse despreciables, pero si el inventario de lo realizado se contrasta con las necesidades acumuladas y ausencias de derecho de los ciudadanos, entonces solo pueden juzgarse como superficiales. Mientras tanto, unos cubanos continúan esperando, otros no esperan cambios y muchos o casi todos desesperan.

 Emilio Hernández