¿Qué ha cambiado en Cuba?

El lector que espere encontrar en este trabajo un listado de cambios ocurridos en el intervalo  en que Fidel Castro delegara el poder, debido a una intervención quirúrgica  de urgencia, y la actualidad quedará defraudado. Al respecto abunda material en la prensa e incluso artículos 1_/  El presente, pretende mostrar los cambios en las estructuras del poder que se han operado, los estilos de dirección y el propio efecto que estos cambios han ejercido en la población cubana.  

 Aunque en la proclama de Fidel Castro 2_/ emitida el 31 de Julio del 2006 se remarcara la provisionalidad de la entrega del Poder, debido a la intervención quirúrgica señalada anteriormente,  la recuperación esperada no tuvo lugar, dando como resultado que el 24 de Febrero del 2008 la Asamblea Nacional del Poder Popular eligiera como Presidente de los Consejos de Estado y de Ministros al general  Raúl Castro, previa cesión definitiva de esos cargos por el enfermo ex mandatario. En todo este periodo lo que ha sucedió realmente es que el gobierno carismático dejó de funcionar. 

 El carisma, como modo de gobierno, no sólo se avala en el poder de comunicación entre una figura y la sociedad. También se fundamenta en hechos históricos que otorgan un poder indiscutible a esa figura. Ello se exacerba con actuaciones cotidianas_ que a veces escapan a toda lógica, pero demostrativas de un poder personal absoluto_ dirección y toma de decisiones por encima de las instituciones, elevación del poder de otras figuras_ por el sólo hecho de preferir el líder su presencia a la de otros con mayor jerarquía en muchos casos_ entre las características más importantes.  

 El primer indicio del fin del gobierno carismático lo constituye el hecho de que los proyectos a los que se le asignan prioridad en la proclama no resultan en realidad priorizados y no todas las  personas mencionadas en la misma disfrutaron del poder que la misma reclamaba. 

Carlos Manuel Valenciaga, secretario del Grupo de Apoyo del Comandante (GAC), fue quien leyó la proclama en el noticiero televisivo, reafirmando de esta forma el poder de la institución. El GAC fue en realidad un segundo gobierno, por no decir el primero en los últimos años. Su poder de interferencia estaba por encima de las estructuras ministeriales y del Partido Comunista de Cuba (PCC).

Los miembros de esta institución salieron de los dirigentes de la Universidad; es por eso que ellos son conocidos como los talibanes cubanos. Algunos de sus miembros pasaban luego a ocupar cargos de importancia dentro del gobierno y organizaciones políticas. Aunque jóvenes, no por ello distingue a los talibanes un perfil reformista. Carentes de una historia heroica o de una aceptación popular, bebieron en la fuente del poder absoluto y tienden a no apartarse de ella. Sin un discurso propio, el cual nunca ha sido permitido en Cuba, repiten consignas y se muestran como los mejores intérpretes del pensamiento del Máximo Líder.

En la actualidad el GAC ha dejado de existir. Sus funciones han vuelto al Secretariado del  PCC. Los principales bastiones de los talibanes, que fueron las organizaciones juveniles, resultaron sacudidas en el pasado mes de Septiembre. En reunión del Buró Nacional de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) fueron sustituidos los siguientes dirigentes: Hassan Pérez del cargo de Segundo Secretario de la UJC. Acompañaba la noticia la siguiente nota del periódico Juventud Rebelde 3_/ “se consideró que el compañero Hassan Pérez Casabona  inicie su proceso de vinculación laboral, como profesor de una institución universitaria perteneciente al Ministerio de las Fuerzas Armadas Revolucionarias”. También acordaron los participantes en el encuentro, que Hilder Torres Escalona, el cual se desempeñaba como organizador de la UJC, cumplimente el servicio militar activo. En la misma reunión se liberó a la presidenta de la organización de Pioneros, cargo que fungió durante ocho años.  Del grupo de talibanes siguen teniendo divulgación en la prensa Felipe Pérez, Ministro de Relaciones exteriores y Carlos Lage Dávila, Secretario del Comité Ejecutivo del Consejo de Ministros, pero ambos dirigentes, por cierto los únicos que proclamaron en Caracas a Hugo Chávez como segundo presidente de Cuba, no cuentan con las atribuciones que muchos esperaban en el proceso transmisión de Poderes. 

 Desde el 26 de Julio del 2006 el Comandante en Jefe no ha sido visto en público y su único medio de comunicación con la población son las “Reflexiones” que escribe y luego divulga la prensa radial, televisiva y escrita. La ausencia personal del líder ha mermado el carisma proyectado sobre el pueblo. Una buena prueba de ellos pudo verse en el Congreso de la Unión Nacional de Escritores y Artistas. En el mismo fue leída una carta del Máximo Líder, donde se alertaba al congreso de los peligros que entraña la Internet. Aunque la lectura de la carta fue ovacionada por los asistentes al congreso, una de las resoluciones del mismo fue la de destacar la importancia del Internet y la necesidad de ampliar su acceso. También en el propio congreso fue cuestionada la política educacional, sector estrella de los “logros de la Revolución” y se discrepó del tratamiento dado a los cubanos que abandonan el país.

 Otro sector estrella, el sistema de salud basado en el médico de la familia ha sido transformado por resultar imposible su mantenimiento, con más de un 50% de estos profesionales en el exterior. La batalla de idea, trazada por Fidel Castro,  consistente en constantes manifestaciones  y mesas redondas interminables, que la población tenía que soportar con estoicismo y rabia, ha sido reducida considerablemente.

Para llenar el vacío del gobierno carismático el general Raúl Castro recurrió en los primeros meses de su gobierno provisional a los líderes históricos. Así, los Comandantes de la Revolución (título que sólo poseen tres personas en Cuba) Juan Almeida, Ramiro Valdés y Guillermo García, serían los que hicieran presencia en actos y actividades importantes. Más transcurrido unos meses, las instituciones partidarias tomaron mayor protagonismo; en el Secretariado y Buró Político del PCC las reuniones se hicieron periódicas. También el Consejo de Ministros comenzó a tener regularmente reuniones. De esta forma, se iniciaba un gobierno de carácter institucional. 

La institucionalidad del nuevo gobierno se vio reforzada el pasado 24 de Febrero con un Consejo de Estado renovado. El mismo está constituido en buena medida por miembros o antiguos miembros de las fuerzas armadas (35%). Esta relación se evidencia aún más en la nueva conformación del Buró Político del PCC, donde las tres cuartas partes de sus miembros proceden del Ejército. Por otro lado, oficiales castrenses dirigen actualmente importantes empresas, las cuales aportan el peso fundamental de los ingresos en divisas de la Isla. Evidentemente, la institucionalidad está basada en la mayor incondicionalidad posible al nuevo Presidente.

Para finales del presente año está anunciada una reestructuración ministerial y para finales del 2009 el congreso del PCC. Con estos eventos quedará conformada una dirección institucional. 

El fin del gobierno carismático no significa que Fidel Castro carezca de Poder. Él no ha renunciado como Primer Secretario del PCC. Su amistad y relación con el presidente venezolano Hugo Chávez se mantiene indiscutible y Venezuela, por medio del suministro petrolero y subvenciones, es un factor de suma importancia para la economía cubana. El Máximo Líder mantiene su presencia en la actualidad cubana por medio de sus “Reflexiones”. Las primeras   tocaban temas desvinculados con la actualidad cubana, pero en el presente año han tomado un tono crítico con medidas o anuncios del gobierno. A juicio de muchos observadores, la paralización de los cambios puestos en marcha y los anunciados por el general Raúl Castro a partir de mediados del 2008, se debe a las críticas del “compañero Fidel”. Esta idea se encuentra robustecida por los hechos ocurridos en el mes de Agosto, cuando dos ciclones abatieron el país. Desde la entrada del primer ciclón (Gustav) llovieron las “Reflexiones”. Cuantificaban los destrozos, las pérdidas, calculaban la ayuda necesaria, determinaban la negativa a aceptar determinadas ayudas _las de 24 países de la Unión Europea y la de Estados Unidos_ dictaban reglas para los controles de precio, en fin, intervenían al gobierno. La ausencia del general Raúl Castro durante 17 días, a partir de la entrada de los huracanes, fue demostrativa del disgusto que esta intervención le produjo o que el mismo cedió todo el protagonismo al Gran Hermano. Las nuevas medidas de limitaciones de precios impuestas a los mercados campesinos, las cuales han provocado el desabastecimiento de este mercado, y el acoso policial en calles y carreteras a las personas que transporten alimentos,  hacen recordar  los mejores tiempos del fidelismo. 

A la población no le importa mucho ni el estilo, ni el modo de gobierno. Ella lo que demanda, sobre todo en momentos de crisis, es solución a sus problemas. El pueblo ha visto perdida las esperanzas levantadas por los anuncios de cambio del gobierno del General y comienza a mostrar su irritación sin temor a la represión. Quizás los mejores ejemplos de esta frustración los podemos encontrar en el joven comunista Eliécer Ávila 4_/, el cual cuestionó ante Ricardo Alarcón, Presidente de la Asamblea Nacional, el sistema electoral, la falta de libertad de movimiento e información, entre otras cosas o en Pedro Campos 5_/, el militante comunista que junto a otros compañeros ha suscrito un documento, donde plantean que el socialismo debe poner al individuo por encima del Estado y hace críticas severas a la falta de libertades económicas y civiles existentes, por venir estos ejemplos de las propias filas de la Revolución.

Un gobierno institucional no puede darse el lujo de ponerse a matar gorriones, inventar vacas enanas o convertir la mantequilla en cañones. Necesita efectuar cambios favorables y sustanciales en beneficio de la población para adquirir la legitimidad necesaria. De no efectuarse cambios a causa de intervenciones ajenas a toda responsabilidad, su gestión se hundirá en un pantano y la única solución que se puede avizorar entonces, es salir cuanto antes del cenagal.

Emilio Hernández

1_/ Hernández, Emilio “Los 100 días del General” y “La marcha del General” decub.de/CubaJournalEs/

2_/ Castro, Fidel “Proclama del Comandante en Jefe Fidel Castro al pueblo de Cuba” ain.cu

3_/Preside José Ramón Machado Ventura reunión del Buró Nacional de la UJC” juventudrebelde.cu

4_/ Méndez Castelló, Alberto “Habla Eliécer Ávila” cubaencuentro.com

5_/ Campos, Pedro “Cuba necesita un socialismo participativo y democrático. Propuestas programáticas”   

     kaosenlared.net

      Yáñez, Eugenio;Benemelis, Juan; Arencibia, Antonio “Dos años de Raúl Castro: “Entre las Reflexiones y  

      las Realidades” cubanalisis.com